LA LOGIA:

mujeres brujas y bichas

MIS OJOS QUE TE DICEN AHORA

HACE DÍAS...

EN UN SILENCIO OPORTUNO NACÍ DE LAS DESESPERADAS SOMBRAS DEL OLVIDO.

CREÍ QUE ESTABA MUERTA EN VIDA PERO EL ALIENTO DE AQUEL ANIMAL ME HIZO RENACER.

SU VIDA AHORA DEPENDE DE LA MÍA Y LA MÍA DE LA SUYA...

ASÍ ES MI HISTORIA...

ASÍ ES LA DE EL...




-Eres un lobo?- preguntaba todas las noches- la bestia muy gentilmente me había rescatado del húmedo frío de la desesperada ciénaga del bosque.


-No soy un lobo, soy una bestia... me hablaba con ese fétido olor que salia de su boca, grisácea y seca


-Qué has comido hoy , que huele así tu boca?


-Las bestias comemos niñas bellas como tu.


-No es cierto, no has visto una mujer semejante en todo lo que llevas hechizado.


La bestia era un obstinado que aun no cumplía los 21, pero en él habían caído todos los años del mundo. La hechicera mala no le dio una rosa, ni tenia que encontrar el amor de una bella mujer que lo quisiera por su interior para que de nuevo fuera príncipe...ni nada parecido. Quizá ese truco lo usaba para atraer chicas y mas chicas que sus sirvientes muy temerosos le llevaban sin mayor resultado. Pero es que la bestia nació bestia y eso lo se yo.


Ese día insistí en decirle lobo. Me había dado a probar un monte extraño y ricamente oloroso, me dijo: esto calmará tu dolor. Luego que lo vi en forma de lobo, casi parecía un príncipe, pero yo como no vivía en la aldea no era ninguna tonta a las que el solía engañar. El no quería calmarme el dolor quería... tragarme. El efecto de la droga no apareció sino levemente... solo alcancé a decirle esa noche... ¡No tendrás algún hongo por ahí, bestia asquerosa?


Otra cosa que si era verdad en la historia era que me la pasaba el santo día en su biblioteca... leyendo libros de magia, hechicería y sobre todo de gastronomía... sexo tántrico y lenguas muertas. La bestia me dejaba leerlos, y al finalizar la tarde llegaba a la biblioteca con su respectiva botella de whisky y un tema para la tertulia de atardecer. Me hacia miles de preguntas eróticas, de mi infancia y cualquier locura que se le ocurriese. Yo no tenía ningún problema en responderle con la mayor franqueza, total, jamás saldría de ese asqueroso castillo y nadie me esperaba afuera. A pesar de esto como su prisionera me sentía a gusto.


- Te conseguí el hongo.

- No hoy no tengo ganas

- Sabes cuánto me costo conseguirlo? Fui yo mismo al bosque

- Es tu problema, así haces ejercicio estas muy gordo.

- Eres una falta de respeto.

- Y tu un pervertido sexual.

- Por que dices eso? Jamás me he leído esos libros, ni los compré, alguien que me los regalo, en cambio tu...

-Yo qué? Si me los leo...También los de cocina, los de animales, bestias, salvajes que viven en el bosque...

- No sigas... hoy no quiero pelear.

- Crees que no sé para que me das toda esa porquería? Crees que no se que me quieres drogar para desnudarme y aprovecharte de mi?

- No es así...

- Pero niégame que lo hacías con las otras.

- Y terminaban robándome. Ninguna quería estar conmigo, se ponían violentas y hasta una me quiso matar...

- Jajajaja que risa, pobrecito la BESTIA

- No me trates así Bella

- Y como quieres que te trate. Todo por arrancar una maldita flor de tu asqueroso jardín. Me tienes presa... pero afortunadamente me siento mejor aquí, que en casa de mis hermanas prostitutas y amorfas.

- Y a tu papá no lo extrañas?.

- Lo de mi papá era mentira y lo sabes. Nos crió Beto un chulo asqueroso que nos quitaba el dinero que trabajaban mis hermanas. El jamás quiso que me dedicara a vender mi cuerpo, por lo que mis hermanas me empezaron a odiar. Ese fue mi padre, ahora debe estar viejo y mas sordo que antes.

- Entonces tu vida ha mejorado.

- No lo se.

No quería reconocer que la bestia me había cambiado la vida. Pasé de vida dantesca a vida grotesca, diría yo. Nada mal. Ahora este ser tan extraño que no se sabe que siente por mi, está a cargo de mi y yo que también soy algo extraña, no deseo irme de este castillo.


Mi hostilidad para con la bestia era cada vez menos fuerte. Me gustaba charlar y tratarlo a las patadas. El siempre tenia una manera encantadora para levantar mi creatividad y hacer que cada insulto fuese cada vez mas brillante.

****

Pasaron unos cuantos años antes de que me enamorara de la bestia y él de su bella, es decir de mi. Jamás nos decíamos nada. Jamás nos tocamos, jamás se me acercó a menos de un metro.

Pero sabía que un sentimiento oscuro y profundo rodeaba la biblioteca cuando ambos estábamos cerca.



- Bella necesito hablarte.

- No deseo hablar ahora. Estoy ebria.

- Has pasado todos estos años esquivándome. Pero aún así no te he exigido nada. Se que una bestia como yo no merece la atención de una mujer como tu.

- Pues sin embargo la tienes, sino, ya me hubiera ido.

- Por que no te has ido?

- Porque creo en la historia de la hechicera.

- jajaja no me hagas reír bella.

- Crees que de verdad, me convertiré en príncipe si logro que me ames? que hay una rosa en el ala oeste del castillo y que al caer el último pétalo, si no logro mi cometido, me quedaré bestia para siempre?

- Pero he visto la rosa.

- Fue la rosa que arrancaste de mi jardín el día que te hice prisionera. La guarde de recuerdo.

- No me importa lo que me digas, bestia asquerosa, creo en la historia.

- Tu me amas?

- Mis ojos que te dicen ahora?

- Que me necesitas, mas no me amas.

- Cual es la diferencia? No es lo mismo.. y si no lo es, entonces, hagamos que sea lo mismo. Estoy contigo y eso basta. Me quedaré para siempre contigo, por que no quiero volver a mi antigua vida, que es mas deprimente que esta. Me quedo por ti y por mi... y por que no deseo lo que está fuera de este castillo.
Hay alguna diferencia entre un lobo y una bestia? Es un animal... pero si hay una clara diferencia entre ser bestia y ser príncipe

- Que será?

- La diferencia entre un príncipe y una bestia es... el hongo....

- Explícate

- El hongo que sabes que me hace verte distinto, pero a la final...eres el mismo... así te vea como "el príncipe"mientras alucino con la droga que me consigues en el bosque o como "la bestia" cuando estoy sana como ahora. Te veo como el hombre que amo o que necesito.


Así la historia no termina... la bestia y yo vivimos para siempre, pero no felices para siempre. La felicidad no existía en ese castillo, quizá la costumbre. Aquí aclaro que el cuento de hadas, estuvo siempre equivocado y que la vida de nosotros transcurrió en medio de silencios, banquetes conversaciones intensas, fieles a lo que sentíamos, sin el temor de un mañana.

LA VERDADERA FABULA ANCESTRAL

3 comentarios:

Vaya, vaya... probablemente la historia me tocó porque yo mismo viví durante seis años los efectos de alguna clase de hongo que me hacía alucinar con que tenía la vida que siempre había soñado. Es fácil dejar que esas raíces se entretejan en el subconsciente, y toma años arrancarlas de raíz.

Y además, hay que recordar la moraleja de The Matrix. hay gente que prefiere vivir en la ilusión antes que enfrentarse a la realidad.

 

años sinetenerme una mañana de sabado a leer una historia tan buena como esta.. exelente contenido, gracia!^_^

 

que bueno que todabia hay personas que se dedican a escribir algo tan bueno como esto, te felicito eres lo maximo..... de todo corazon que dios te guie y te ilumine siempre..... mi caracola atte tu hongo